Intente buscar por palabras clave, código de producto/pedido o número de serie, por ejemplo, "CM442" o "información técnica"
Introduzca por lo menos 2 caracteres para iniciar la búsqueda.
  • Historial

Autoclaves sanitarias

Reducción del riesgo en la esterilización por lotes

Las autoclaves sanitarias y los esterilizadores a vapor dependen de mediciones de temperatura exactas, precisas y fiables para cumplir con los requisitos del proceso. La nueva tecnología de sensores automatiza las recalibraciones para reducir el riesgo entre los intervalos y proporciona una certificación de lotes apta para auditorías.

Autoclaves sanitarias que realizan una esterilización a temperaturas elevadas mediante vapor saturado ©Endress+Hauser

Autoclaves sanitarias que realizan una esterilización a temperaturas elevadas mediante vapor saturado

Los resultados

  • verificación del proceso de automatización

  • control preciso del proceso

  • incertidumbre reducida lote a lote

  • ahorro de costes y de tiempo

El desafío

La práctica habitual en el funcionamiento de las autoclaves sanitarias consiste en monitorizar la temperatura en la parte más fría del proceso instalando un sensor en el desagüe o cerca de la parte inferior de los equipos de esterilización a vapor. Puesto que los instrumentos de medición están sujetos a desviaciones provocadas por el desgaste o por daños mecánicos, se deben recalibrar para garantizar una monitorización fiable del proceso. Si falla algún instrumento, no hay forma fiable de determinar rápidamente la duración y los lotes afectados entre los ciclos de calibración.

Nuestra solución

El método de autocalibración que utiliza la temperatura Curie como punto de referencia fijo integrado. Una fase de prueba ha demostrado con éxito que el instrumento autocalibrado funcionaba muy por encima de las expectativas. De media, durante su período de instalación de un mes y 600 horas de funcionamiento, el instrumento realizó aproximadamente 80 autocalibraciones in situ con éxito. Esto equivale a una media de casi dos lotes y dos calibraciones al día.

Se instaló el sensor de autocalibración en el punto más frío del autoclave, junto a un sensor ya existente, para determinar una segunda referencia de temperatura. La sonda se calibró en un laboratorio de calibración acreditado antes y después de la prueba. Las 80 calibraciones realizadas fueron un éxito y la precisión del sensor estuvo dentro de los límites especificados.